Amatlán.- Rafael Reyes Muñoz, de 33 años de edad, quien fue lesionado durante el ataque a un taller eléctrico en Los Ángeles, en donde fueron ejecutadas dos personas, aún continúa internado en el Hospital General Córdoba y su estado es reportado como grave.
El miércoles se pudo conocer que el también trabajador del taller de servicio eléctrico se encontraba ya con muerte cerebral debido a que uno de los proyectiles dañó el órgano vital.
Sin embargo, a pesar de su estado crítico, los médicos de guardia tratan de salvarle la vida al joven.
Por el momento la Fiscalía Regional mantiene abierta una Carpeta de Investigación por el doble homicidio cometido en agravio de quien en vida respondiera al nombre de Agustín Ferrara Navarro, El Curtis, propietario del taller, y el albañil Gerardo Manuel Flores Romero, de 28 años, quien estaba en el taller porque había ido a recoger su camioneta.
En las investigaciones realizadas por las autoridades policíacas y ministeriales, todo apunta que se pudiera tratar de un ajuste de cuentas, sin embargo, será a la culminación de las diligencias cuando se determine si el caso continúa con la autoridad del fuero común o en la PGR.
Estas tres personas fueron baleadas el martes, alrededor del mediodía, por tres sujetos desconocidos que llegaron al taller de servicio eléctrico y sin mediar palabra les dispararon, matando a los dos primeros, mientras que a Rafael Reyes Muñoz, de 33 años, lo dejaron herido de gravedad. Este miércoles el trabajador permanecía internado en la sala de terapia intensiva del Hospital General Córdoba y su estado de salud era reportado como grave.
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