Egipto. El avión se destruyó en el aire, informó este domingo el Comité de Aviación Interestatal (CAI) de Rusia.
Tras el derrumbe de un avión de la aerolínea rusa Kogalimavia (Metrojet), un Airbus A-321-200, que llevaba a bordo 224 personas, el ministro ruso de Transportes y un equipo de investigadores de alto nivel llegaron a la península del Sinaí, lugar donde se derribó la aeronave.
"La destrucción tuvo lugar en el aire y los fragmentos resultaron desperdigados por una superficie de cerca de 20 kilómetros cuadrados", señaló Víctor Sorochenko, director ejecutivo del CAI, a la prensa rusa.
Sorochenko aseguró que "es todavía pronto para sacar conclusiones" sobre las causas de la tragedia aérea, marcada como la mayor en la historia de Rusia.
De acuerdo a versiones de testigos oculares el avión que transportaba en su mayoría a rusos, ya "ardía en llamas" antes de chocar contra la tierra.
Por su parte Serguéi Mordvintsev, ex director la aerolínea, aseveró, ante la prensa, que los aparatos de esa clase de la aerolínea nunca habían sufrido problemas técnicos.
"El A-321 es un aparato seguro. Durante su período de explotación sus motores nunca experimentaron ningún problema", señaló a la agencia Interfax, citó el País.
Tras publicaciones en redes sociales por parte del grupo terrorista Estado Islámico (EI), autoridades rusas y egipcias descartaron un posible atentado terrorista como causa del accidente.
En tanto, técnicos de ambos países han procedido al análisis de las cajas negras del avión que, a decir del ministro de Transporte ruso, han sufrido "daños técnicos menores".
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