Alrededor de 40 pasajeros que viajaban a Monterrey en un autobús de Senda, fueron víctimas de asalto en la carretera, a manos de dos delincuentes que iban a bordo de la unidad.
Esto ocurre, 53 días después del incidente en un autobús de Omnibus con un modus operandi similar, en el que el atraco ocurrió en la misma Carretera Nacional el 21 de diciembre, cuando ocho personas fueron víctimas de los perpetradores.
En aquella ocasión, el camión iba con rumbo a Torreón, Coahuila, y aunque se denunciaron los hechos no se han dado a conocer avances ni detenciones.
El viernes 12 de febrero sucedió otra vez que un autobús ahora dede Senda, pasada la caseta de cobro de la autopista, fue atracado.
“No se muevan o les meto un plomazo”, dijo uno de los dos ladrones, para después despojar de sus pertenencias a los pasajeros asiento por asiento, obligando a los ya asaltados a meterse al baño y a otros a mantenerse agachados en el pasillo, todo mientras el camión seguía en movimiento.
Por más de 40 minutos los pasajeros vivieron angustiantes momentos de incertidumbre, en los que la posibilidad de que el atraco se tornara violento no era descartada.
Según relataron testigos, uno de los asaltantes permanecía vigilante al frente de la unidad, presumiendo que bajo la sudadera portaba un arma que nunca mostró abiertamente.
Una vez que se aproximaron al área conurbada, los delincuentes solicitaron al chofer se detuviera para descender con el botín y escapar a un lado de la carretera.
El dato
*La descripción de uno de los asaltantes detalla a una persona de baja estatura, complexión delgada, tez aperlada, cuya edad oscilaba en los 40 años; sin embargo, los rostros no pudieron ser vistos debido a que portaban bufandas que ocultaban sus rasgos.
Los localizan, pero se impone la corrupciónLa ubicación exacta de los atracadores del autobús fue revelada a través de uno de los celulares robados, información que se entregó a sólo minutos del suceso al Ministerio Público de Nuevo León para que actuara en consecuencia; sin embargo, éste señaló que en unos tres días les hablaban para que les proporcionaran el dato. Hasta ahora no han sido contactadas las personas afectadas.
“Mi amiga se puso a rastrear su teléfono a ver si lo prendían y de hecho la primera ubicación que dio fue justamente donde se bajaron, pasó una hora y media y ellos seguían en el mismo lugar, a lo mejor esperando a que fueran por ellos; la segunda ubicación ya dio en una casa en Ciénega de Flores”, contó una de las personas que viajaban en el autobús.
La ubicación de los criminales es un valioso dato que una autoridad responsable hubiera aprovechado para actuar de inmediato, para el MP neolonés no había prisa por atrapar a los ladrones con el botín sustraído y diversos testigos dispuestos a declarar.
“Fuimos al MP de Nuevo León, les dijimos que teníamos la dirección y nos dijeron ‘sí pero ahorita no nos sirve de mucho, el lunes te van a hablar y se los pasas’, hasta la fecha no nos han hablado”, manifestó.
EL MAÑANA NUEVO LAREDO
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